Debate sobre la narración interactiva, creación de relatos hipertextuales, posibilidades de construcción de tramas hipermedias e interactivas

jueves, 14 de mayo de 2009

Si sufrís de distancia


Os presento a Mutsugoto. Es un nuevo invento de una empresa llamada Distance Lab que simula el contacto físico entre dos usuarios por Internet. No sé muy bien cómo funciona y me cuesta creer que sea efectivo, pero oye, es un buen comienzo para acortar distancias, o al menos lo es teniendo algo de fe en las tecnologías futuras. Os dejo la noticia y una pregunta; ¿creeis que esto es realmente útil? Saludos.


5 comentarios:

  1. No puedo negar que un invento como este me produce gran curiosidad... Sobre todo porque me cuesta imaginarme como funciona y lo que se debe sentir cuando un montón de rayos azules que representan supuestamente a tu pareja te recorren de arriba a abajo...

    Yo soy partidaria de todo aquel avance tecnológico que permita acortar distancias entre las personas aunque, aún así, sin ánimo de ser reacia a algo que aún no conozco, debo admitir que sí que me da algo de "cosa" este nuevo artilugio...

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  2. A mí, cuanto menos, me causa un poco de desconcierto y de reticencia. Me parece llegar un poco lejos, ¿no?
    Está claro que nada podrá reemplazar al contacto físico, así que esto no será más que un mal sustituto.

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  3. La verdad que me cuesta entenderlo, no se si porqué soy bastante ignorante en este tipo de cosas. Los japoneses son una locura inventando cosas, y esto podría facilitar las cosas a muchas parejas que esten en la distancia. Al final se acabará cumpliendo el dicho de que No hay distancias. Ahora para mi donde esté el contacto humano que se quite Internet y espero no encontarme nunca en situación de tener que usar este tipo de inventos

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  4. A mi la verdad no me da nada de buen rollo, y dudo mucho que lo probase. Muy mal tendría que estar pasándolo. Solo con pensar que me van a atravesar rayos azules...prefiero que me lo cuente otra persona y si veo que no pasa nada pues igual..jaja

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  5. Caricias luminosas, jajajajajaj. ¡Venga! es buenísimo. Yo lo probaría sólo por curiosidad, aunque creo que me daría un ataque de risa y eso acabaría con todo el asunto de "amago de intimidad".
    Aún así me parece que el invento entra en la categoría de "artilugios curiosos" que en la de objetos útiles.

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