Hola a tod@s!
Hoy os muestro a otros más que quieren ser modernos. O jili***** porque lo que hay que ver...
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha actualizado su perfil en Facebook y ha enviado un "mensaje personal" a sus más de 101.000 "amigos" para garantizarles que revisa su correo y animarles a que le escriban."Me falta tiempo, pero estad seguros de que estoy informado de los intercambios que se producen en esta página y aprecio las muestras de simpatía", señala el jefe del Estado galo en el mensaje que ha colgado hoy en su página.
Sarkozy pide a sus "amigos" que no duden en consultarle cualquier duda y les recuerda que esta vía de comunicación tiene como objetivo "responder mejor" a sus demandas de información y transparencia.
El "mensaje personal" termina ahí, pero quienes pueden acceder a su página pueden enterarse, por ejemplo, de lo que ha leído el presidente últimamente y de las últimas películas que ha visto.
Para la foto de su perfil, Sarkozy ha escogido una imagen más informal de lo habitual, sin corbata, pero lo que más ha llamado la atención, al menos entre la prensa francesa, es un vídeo que ha grabado junto a su esposa Carla Bruni.
La escena tiene lugar en una de las dependencias privadas del Palacio del Elíseo, donde la primera dama francesa mantiene un encuentro con un grupo de lectoras de la revista 'Femme Actuelle', en el que irrumpe el presidente por sorpresa. Y lo hace acompañado de los dos perros de la pareja: Clara y Dumbledore.
Sarkozy besa a su esposa, le comenta que acaba de hacer deporte y que luego va a reunirse con el primer ministro de Iraq y ella le despide con un cariñoso "ánimo chouchou (cariñito)".
Sarkozy pide a sus "amigos" que no duden en consultarle cualquier duda y les recuerda que esta vía de comunicación tiene como objetivo "responder mejor" a sus demandas de información y transparencia.
El "mensaje personal" termina ahí, pero quienes pueden acceder a su página pueden enterarse, por ejemplo, de lo que ha leído el presidente últimamente y de las últimas películas que ha visto.
Para la foto de su perfil, Sarkozy ha escogido una imagen más informal de lo habitual, sin corbata, pero lo que más ha llamado la atención, al menos entre la prensa francesa, es un vídeo que ha grabado junto a su esposa Carla Bruni.
La escena tiene lugar en una de las dependencias privadas del Palacio del Elíseo, donde la primera dama francesa mantiene un encuentro con un grupo de lectoras de la revista 'Femme Actuelle', en el que irrumpe el presidente por sorpresa. Y lo hace acompañado de los dos perros de la pareja: Clara y Dumbledore.
Sarkozy besa a su esposa, le comenta que acaba de hacer deporte y que luego va a reunirse con el primer ministro de Iraq y ella le despide con un cariñoso "ánimo chouchou (cariñito)".
Pues venga, chouchous, ¿no estáis loc@s por ver a Sarko y la Bruni en acción? Seguro que dentro de poco se ponen una cámara también en la habitación...
Por favor... Lo peor es que funciona. Las redes sociales crean sentimiento de proximidad, así que probablemente esos miles de "amigos" sientan que están más cerca del presidente que el resto de franceses sencillamente por tenerlo agregado a una red social y poder ver este tipo de chorradas exhibicionistas.
ResponderEliminarLo peor es que seguramente esto le beneficiará al presidente galo. Las redes sociales están siendo usadas a modo de una nueva herramienta de marketing por miles de empresas, y ahora también por políticos. Sinceramente prefiero no opinar sobre estos dos personajes, que más que política parece que hagan prensa del corazón, pero como es lo que vende....
ResponderEliminarVolviendo al tema, todos se están subiendo al carro de las redes sociales para mejorar su imagen. Así que esto debe funcionar, y las nuevas herramientas de marketing para el futuro serán las redes sociales. En unos años se empezarán a estudiar en las universidades.
Me parece ridícula la actuación de ciertos presidentes que se basan en difundir ciertas actitudes por los medios de comunicación. No existe una guía de buenas prácticas para fomentar los usos correctos de Internet, pero la sociedad por muy próxima que se sienta al Facebook de Sarkozy o Carla Bruni saben que es un hecho que carece de interés y que el verdadero Sarkozy no será relamente el que responda a sus comentarios, sino que se trata de una campaña de marketing.
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